Funcionales, sencillos y con líneas puras. Estas son las 3 características que todo mobiliario de estilo nórdico ha de seguir para lograr salones acogedores, luminosos y espaciosos; la premisa del diseño nórdico
Han pasado más de 50 años desde que en 1954 se acuñara por primera vez el término de decoración nórdica y, sin embargo, se trata de un estilo que nunca pasa de moda y que, con pequeñas adaptaciones, sigue formando parte de las casas más modernas y vanguardistas de la actualidad.
Pero, ¿por qué tiene tanto éxito este tipo de decoración? Básicamente porque lo que busca es crear hogares acogedores, donde se huye de lo recargado y todos los muebles cumplen una funcionalidad, más allá de decorar.
Así las cosas, este tipo de decoración es ideal para todo tipo de familias, bolsillos y estilos de vida. Por eso, hoy queremos detenernos a analizar aquellos muebles que nunca han de faltar en un salón nórdico. Así que si este estilo te gusta y quieres incorporarlo a tu casa o ya lo tienes, pero te gustaría tener nuevas ideas, sigue leyendo porque estoy segura de que te va a resultar muy interesante.
Características de los salones nórdicos
Como bien sabes, el estilo de decoración nórdica responde al estilo de vida que se da en estos países. Y si por algo se caracterizan es por hacer mucha vida en casa, tanto familiar como social, por lo que el salón es uno de los lugares que con más mimo se cuidan en la cultura nórdica, por ser el lugar de reuniones preferido de sus habitantes.
Así las cosas, sus salones siempre van a tener:
Precisamente, el color blanco que suele ser el que se escoge para las paredes- será el encargado de aportar luminosidad al salón, además de dar la sensación de que es más grande y de que es un espacio limpio y, por tanto, que apetece estar en él.
Cómo son los muebles de los salones nórdicos
Teniendo en cuenta todo lo mencionado en el apartado anterior, los muebles de salones nórdicos han de ser:
5 tipos de mueble para tu salón nórdico
Ahora que ya sabes cómo son los salones nórdicos y sus muebles, te invito a que en tu lista de la compra no falten los siguientes:
Recuerda que, como complementos, siempre puedes añadir cuadros de líneas sencillas y, a ser posible, con marcos blancos, de plata o de madera, que no llamen mucho la atención y que en su interior contengan recuerdos de la familia o flores disecadas, por ejemplo. Las láminas hechas a lápiz también casan a la perfección en este tipo de salones. Los cojines, los puff o las lámparas de pie también tienen buena acogida.
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